Monegros Desert Festival: Una aventura en el desierto
Son 30 años que lleva Monegros dando fiesta. Parece mentira que lo que empezó siendo una barbacoa de amigos se fue expandiendo en las entrañas del desierto con sets de artistas bien punteros en El Corral y El Pajar hasta convertirse en la rave que es hoy en día.
Quién iba a decir que la familia Arnau estaba tan solo trazando lo que hoy es un imperio de su cuarta generación. Así nació Monegros y así lo tenemos a día de hoy, recogiendo una pequeña parte de cultura urbana y uniéndola con la cultura de club y la rave. El desierto ha acogido el tour de Wu-Tang Clan y ha dado su mano a los retirados Pendulum que podías ver como dj set pero ya nunca más como live performance.
El festival cumplió con sus promesas de mejorar ciertas partes y esto nos permitió, por ejemplo, pedir nuestras consumiciones rapidito para calmar la sed y no perdernos ni un minuto de ese Sound System Temple donde empezamos la tarde viendo a Ergo Pro e Ill Pekeño.
Este duo la armo parda, tuvo al público en sus manos haciendo cantar a todos con sus letras y su flow. “Riquelme & Okocha” fue la canción que dejó al público casi sin voz creando una energía brutal en estas primeras horas de festival. Ergo Pro e Ill Pekeño estaban ready soltando sus raps con una destreza y una carisma digna de la ocasión.
FERNANDOCOSTA lió una bien gorda. Si sus canciones ya nos parecen lo más y su forma de rapear nos cautiva, el de Ibiza se presentó en el escenario con una banda compuesta por guitarras, bajo y un batería dando otro color al escenario y a tus oídos. Su combinación vándala, convirtiendo sus temas en puro guitarreo heavy o pasándolas a puro gitaneo, sorprendió gratamente tocando temas como “100 Problemas” o “Malamanera”.
Su momento más épico fue la locura de pogo que montó en un momento dirigiendo al público a hacer círculos grandes y diciendo “ya sabéis que tenéis que hacer”; empezar el desmadre entre saltos y empujones amistosos que levantaron el polvo del desierto.
Dj Bobby Bob tuvo un papel muy importante, y es que pinchar para Monegros justo antes de Wu-Tang Clan no es nada fácil. El dj que calentó el ambiente lo hizo brutal poniendo temazos oldschool uno tras otro poniéndonos a todos a bailar.
Wu-Tang Clan salió también con banda completa y sin olvidar la figura del dj. RZA capitaneó la velada sacando champán para recibirnos. Se armó la locura, la gente saltando sin parar gritando cubriéndose la boca con bandanas para no respirar polvo y seguir cantando temazos como C.R.E.A.M., Method Man o People Say.
Nos faltó Method Man y sus solos quedaban inundados únicamente por los coros de sus compañeros. El público quedó eclipsado con la presencia de Young Dirty Bastard sacando la esencia de su padre, la energía la voz, un artista entrañable que se quedó hasta el final firmando camisetas y haciéndose fotos. Pero hubo otro momento merecedor de mención, y es que el dj acabó sin zapatos haciendo scratch con los pies durante el pedazo de homenaje que se marcaron por los 50 años de hip hop.
Monegros fue demasiado intenso, pero nunca es demasiado, nos encantó y pensamos repetir. Nos preguntamos a quién nos traerán esta vez para hacernos polvo y dejarnos sin voz. En el desierto hemos disfrutado íntegramente, hasta OCB nos regaló un cargamento de papel de fumar y los seguridad fueron tolerantes con el consumo de cannabis evitando riñas y pidiendo que te camuflases un poquito en lugar de usar la agresividad que corta el vibe del festi. Un diez para Monegros ¡Hasta pronto! Por los momentos, nos vemos en el club G13.
G13 Club es un círculo privado de consumidores de cannabis con sede en Barcelona y una plataforma multidisciplinar que desarrolla y produce distintas actividades relacionadas principalmente con la cultura urbana, la música y el arte.