La medida del cannabis recreativo es derrocada en Oklahoma
Los activistas de la reforma del cannabis en Oklahoma sufrieron una estrepitosa derrota en las urnas cuando la medida para legalizar el cannabis recreativo en el estado fue derrotada en las urnas a principios de marzo. Los activistas esperaban que Oklahoma, que ya había aprobado una de las leyes sobre cannabis medicinal menos restrictivas del país, estuviera preparada para dar el siguiente paso y legalizar el cannabis recreativo.
Sin embargo, Oklahoma sigue siendo uno de los estados más conservadores del país, y la medida de legalización se encontró con una fuerte resistencia por parte de una oposición bien organizada y financiada. A pesar de legalizar el cannabis medicinal, Oklahoma tiene algunas de las leyes más estrictas del país en materia de cannabis, ya que la simple posesión se castiga con hasta un año de prisión y una multa de 1.000 dólares.
Cualquiera que sea sorprendido vendiendo menos de 25 libras de cannabis en Oklahoma se enfrenta a una multa de 2.000 dólares y una pena de prisión de 2 años a cadena perpetua. Las penas pueden ser significativamente mayores para cualquiera que sea sorprendido vendiendo cannabis cerca de una escuela o a un menor, pero la cuestión principal es la amplia gama de posibles años de cárcel ha permitido a los jueces de Oklahoma básicamente encerrar a cualquiera y tirar la llave por vender incluso una pequeña cantidad de cannabis. Hay personas que pasarán 10, 15 o incluso 25 años en las cárceles de Oklahoma por vender unos pocos gramos de cannabis.
Se esperaba que la medida recreativa hiciera que ese tipo de sentencias draconianas fueran cosa del pasado, pero una campaña muy bien financiada por fundamentalistas religiosos y conservadores para «no dejar que Oklahoma se convierta en California» resultó difícil de superar. Otra cuestión que jugó en contra de los reformistas del cannabis es que la medida de legalización formaba parte de unas elecciones especiales y no de unas elecciones generales.
Históricamente, la participación de los votantes progresistas en las elecciones especiales es mucho menor y ese resultó ser el caso aquí. No ayudó el hecho de que en el período previo a las elecciones se produjeran varios robos violentos de alto perfil en operaciones de cannabis medicinal en el estado, lo que no hizo sino asustar aún más a la base conservadora de Oklahoma. Al final, la medida de legalización de Oklahoma fue derrotada en los 77 condados del estado, por lo que no fue una elección muy reñida.
Sin embargo, la buena noticia es que sigue siendo relativamente fácil obtener licencias de cannabis medicinal en Oklahoma y existe una red bastante sólida de dispensarios en todo el estado. Se calcula que hasta un 10% de los adultos de Oklahoma tienen carnés de cannabis medicinal. Los reformistas del cannabis se toman la derrota con calma y planean volver a presentar la medida en las próximas elecciones generales, donde puede que haya más votos a favor. G13 Magazine seguirá de cerca los nuevos acontecimientos y se asegurará de que nuestros lectores estén al día.
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